El ex presidente Donald Trump aceptó ser entrevistado por el FBI como parte de la investigación sobre el intento de asesinato que tuvo lugar en Pensilvania a principios de este mes, según informó un funcionario el lunes.

La entrevista con Trump, candidato presidencial republicano para las elecciones de 2024, forma parte del protocolo estándar del FBI para hablar con las víctimas de delitos federales durante el curso de sus investigaciones. El viernes, la agencia reveló que Trump fue alcanzado por una bala o un fragmento durante el ataque del 13 de julio en un mitin de campaña en Butler, Pensilvania.

El objetivo de la entrevista es «obtener su perspectiva sobre lo que observó, al igual que cualquier otro testigo del crimen», explicó Kevin Rojek, de la oficina del FBI en Pittsburgh.

El FBI también proporcionó nuevos detalles sobre el atacante, Thomas Matthew Crooks, de 20 años, incluyendo sus búsquedas en internet, que revelaron su interés en tiroteos masivos, plantas de energía, explosivos improvisados y el intento de asesinato del primer ministro de Eslovaquia a principios de este año. Crooks también había investigado la distancia desde la que Lee Harvey Oswald disparó para asesinar al ex presidente John Fitzgerald Kennedy en 1963.

A pesar de haber realizado cientos de entrevistas, el FBI aún no ha logrado determinar el motivo del ataque. Sin embargo, indicaron que la imagen de Crooks es la de un individuo solitario que mantenía sus actividades en secreto y cuyo principal círculo social era su familia.

Los padres de Crooks han mostrado una “extrema disposición a cooperar” con los investigadores, quienes confirmaron que la amplia planificación del ataque se realizó en Internet. Los padres afirmaron no conocer los planes de su hijo, y los investigadores no tienen razones para dudar de su declaración, según el FBI.

Además, el historial de búsquedas de Crooks incluía no solo a Trump, sino también al presidente estadounidense Joe Biden y las fechas de la Convención Nacional Demócrata de agosto en Chicago.