En un operativo masivo, la policía italiana detuvo a 147 presuntos miembros de la Cosa Nostra, la mafia de Palermo, en lo que se considera la mayor operación antimafia desde 1984. La acción, que involucró a 1.200 agentes y fue coordinada por la fiscalía de Palermo, tenía como objetivo desmantelar los clanes que aún operan en la capital siciliana y en otras ciudades del país.

La investigación, llevada a cabo durante dos años, reveló intentos de reorganización dentro de la Cosa Nostra y su creciente relación con la ‘Ndrangheta, la mafia calabresa. Entre los detenidos hay figuras clave recientemente liberadas de prisión. Los sospechosos enfrentan cargos como asociación ilícita, apuestas ilegales y tráfico de sustancias prohibidas.

La primera ministra Giorgia Meloni calificó la operación como un «fuerte golpe» contra la mafia y reafirmó su compromiso con la lucha contra el crimen organizado. Autoridades advirtieron que, aunque estas detenciones son un paso importante, la mafia sigue teniendo influencia en sectores vulnerables, especialmente entre los jóvenes.