La aparición de drones no identificados, descritos como del tamaño de un automóvil, ha generado alarma en Nueva York y Nueva Jersey, donde residentes reportan avistamientos de estos dispositivos realizando maniobras inusuales, como giros de 90 a 270 grados. Ante esta situación, la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, solicitó apoyo a las autoridades federales, mientras el presidente electo, Donald Trump, sugirió derribarlos.

La noche del viernes, un pequeño aeropuerto en Nueva York cerró sus pistas durante una hora debido a la presencia de estos drones, según informó Hochul. Los residentes han formado un grupo en Facebook para compartir información sobre el fenómeno, el cual ya cuenta con 44 mil miembros.

Aunque el FBI y la Casa Blanca señalaron que no existe evidencia de que estos drones representen una amenaza para la seguridad nacional o pública, la situación ha generado especulación y críticas, especialmente por parte de Trump, quien cuestionó la falta de respuesta del gobierno saliente.

Este fenómeno sigue siendo investigado mientras aumenta la preocupación entre los habitantes del noreste de Estados Unidos.