El gobierno de Estados Unidos, bajo una orden ejecutiva del presidente Trump, planea designar a más de media docena de cárteles y grupos criminales de América Latina como organizaciones terroristas extranjeras. La medida permitirá al gobierno estadounidense imponer sanciones económicas severas y acciones legales contra estos grupos, considerados una amenaza para la seguridad nacional.
La orden ejecutiva, firmada el 20 de enero, busca «eliminar totalmente» a estas organizaciones, acusadas de tráfico de drogas, migración ilegal y otros crímenes transnacionales. El Departamento de Estado, liderado por Marco Rubio, ha informado a comités del Congreso sobre las designaciones, que podrían anunciarse próximamente.
La medida ha generado tensiones diplomáticas, especialmente con México, que ha intentado evitar esta clasificación.