Justin Trudeau, primer ministro de Canadá desde 2015, anunció su renuncia al liderazgo del Partido Liberal y al cargo que ha ocupado durante casi una década. Trudeau explicó que tomó esta decisión tras reflexionar junto a su familia y considerar que las divisiones internas en el partido limitan su capacidad para liderar en las próximas elecciones, previstas para este año. Durante su mandato, Trudeau enfrentó desafíos como escándalos éticos, críticas por el aumento del costo de vida y tensiones políticas que impactaron su popularidad.

La salida de Trudeau llega en un momento de incertidumbre para Canadá. El Parlamento será prorrogado hasta marzo de 2025, permitiendo al Partido Liberal tiempo para elegir un nuevo líder. Entre los posibles sucesores destacan figuras como Chrystia Freeland, exviceprimera ministra, y Mark Carney, exgobernador del Banco Central. Mientras tanto, la oposición conservadora, liderada por Pierre Poilievre, continúa criticando las políticas liberales, incluyendo la fijación de precios al carbono.

Este cambio marca el fin de una era para el Partido Liberal, que logró consolidarse en el poder bajo el liderazgo de Trudeau, pero ahora enfrenta el desafío de renovar su estrategia para recuperar la confianza del electorado en medio de un clima político polarizado y una creciente presión social.