El paro nacional convocado para el miércoles 4 de septiembre se ha anunciado en respuesta a la reforma judicial propuesta por el presidente saliente Andrés Manuel López Obrador, respaldada por la presidenta electa Claudia Sheinbaum. Esta reforma, que ha generado controversia en varios sectores de la sociedad, incluye cambios significativos como la elección popular de jueces y magistrados, la reducción del período de funciones de 15 a 12 años, y la reestructuración de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

El paro tiene como objetivo expresar el rechazo a estos cambios, que algunos consideran podrían afectar la independencia y el funcionamiento del Poder Judicial en México. Se pide a la ciudadanía que durante 24 horas no trabaje, no compre nada, ni pague servicios como una forma de protesta.

La reforma propuesta también incluye la creación de un nuevo Órgano de Administración Judicial, la aceleración de procesos judiciales y la imposición de límites salariales a jueces y magistrados, buscando, según el gobierno, reforzar la legitimidad democrática y combatir la corrupción en el sistema judicial. Sin embargo, las preocupaciones sobre el impacto de estas medidas han llevado a la convocatoria del paro.