Rusia. – La Corte Penal Internacional (CPI) anunció este viernes que ha emitido órdenes de arresto contra el presidente de Rusia, Vladimir Putin, y la funcionaria Maria Alekseyevna Lvova-Belova por su presunta responsabilidad en el crimen de guerra de deportación ilegal de población (niños) y traslado ilegal de población (niños) de las áreas ocupadas de Ucrania a la Federación Rusa. Lvova-Belova es la funcionaria rusa en el centro del presunto plan para deportar por la fuerza a miles de niños ucranianos a Rusia.

La CPI indicó que existen motivos razonables para creer que Putin es individualmente responsable de estos crímenes cometidos en el territorio ocupado de Ucrania al menos desde el 24 de febrero de 2022, por haberlos cometido directamente, junto con otros y/o a través de otros, y por no haber ejercido un control adecuado sobre los subordinados civiles y militares que cometieron los actos o permitieron su comisión, y que estaban bajo su autoridad y control efectivos.

Según varios gobiernos europeos y Estados Unidos, Rusia ha llevado a cabo un plan para deportar por la fuerza a miles de niños ucranianos a Rusia, a menudo a una red de decenas de campos, donde los menores son sometidos a reeducación política. Lvova-Belova es acusada de participar en estos esfuerzos, que incluyen la adopción forzosa de niños ucranianos por familias rusas, cambios legislativos para agilizar la concesión de la ciudadanía de la Federación Rusa a niños ucranianos y la expulsión deliberada de niños ucranianos por las fuerzas de Rusia.

Este anuncio de la CPI se produce después de meses de investigación y representaría los primeros cargos internacionales presentados desde el inicio de la guerra de Rusia en Ucrania. Rusia ha calificado de «absurdas» las acusaciones sobre traslados forzosos y ha dicho que hace «todo lo posible» para que los menores permanezcan con sus familias.